

Y eso es Evangelizar a los niños de una villa: llevar la Buena Nueva en todos los estratos y transformar desde adentro a través de nuevos criterios de juego, de valores determinantes. El apostolado, como afirma Benedicto XVI, es una consecuencia que se desprende de la fe y actúa por amor.
IR A COMPARTIR LA TARDE EN LA VILLA ES UN MOVIMIENTO DEL CORAZÓN TRANSFORMADO, QUE PASA POR EL CORAZÓN DE DIOS, PARA AMAR A LOS NIÑOS.
5 comentarios:
Qué alegría por todos los que pudieron compartir la tarde con los niños de la Lonja! Me hubiera gustado ir también, pero se me complicó un poco por el estudio...
Abrazo en Xto!
Viva Cristo!!!!
Muy buena tarde. Con frio y todo se fue...se jugó...se anunció...y todo sin perder la alegría. Eso es la Misión!
excelente tarde de villa!con frio como decia cristian pero no importo....cristo como siempre se hizo presente!
buena semana..
un abrazo en Cristo!
Excelente esa tarde, inolvidable. Sobre todo ver las caritas de alegria de esos niños, gracias a todos lo que lo hicieron posible.
Nos vemos en la proxima
Publicar un comentario