10.5.09

Tarde, pero seguro: Crónicas de Corvallis

Ave!

Quiero compartir un breve testimonio de la Fragua VII en Corvallis, Oregon, EEUU, que se realizó del 17 al 19 de abril, porque esta comunidad de la Fragua Córdoba tenía un rol importante en la Fragua VII.

Fue un fin de semana bárbaro: mucho sol, mucha oración, y mucho sentido de la universalidad de la comunidad Fragua, por la participación de la comunidad aquí en la cadena de rosarios, y aún más por las cartas que algunos de ustedes escribieron a los chicos estadounidenses. Ya vuelvo a este punto . . .

Yo llegue el viernes a la noche, para la reunión del equipo, y fue muy lindo reunirme con los chicos de la Fragua VI, que no me habían estado esperando. Un chico, Jack, nos había dicho que iba protestar si no venía la Sociedad de María a la Fragua VII porque no podía imaginar la Fragua sin la SdM . . . quizás Jack estaba protestando a Dios porque, en fin, la SdM se hizo presente!

Porque nadie (incluso yo misma) había imaginado estar ahí para la Fragua. No tenía ninguna charla o papel, así que podía aprovechar todo el fin de semana para el apostolado personal con las fraguistas, las chicas del EDA y las asistentes . . . y fue hermoso poder ver, en un nivel tan personal y concreto, cómo Dios fue obrando en sus corazones. No podía creer la apertura de las chicas, cómo se abrieron sus corazones cuando charlamos . . . y, como ustedes ya saben bien: cuando llegó el día domingo, fueron mujeres nuevas, habiéndose encontrados con Jesús, habiendo experimentado el amor de Dios Padre.

Y todo esto, todo lo que Jesús hizo en ellos durante la Fragua, les ha conectado invisiblemente con ustedes, los fraguistas de otro continente, otro país, otro idioma. Cuando Matías presentó la cadena de rosarios el domingo, les contó de la Comunidad Fragua de Córdoba, cuán numerosos son los fraguistas, cómo rezaron, las cartas . . . y luego revelamos la cadena. Los chicos quedaron asombrados—y muchas de las chicas me dijeron después que ahora la oración por ellas tiene un sentido más profundo, porque ahora pueden ver que la oración es poderosa: lo que Dios estaba obrando en ellos durante la Fragua se podía ver como fruto de la oración de la comunidad Fragua y los demás que rezaron. Gloria a Dios! Y gracias a cada fraguista de Córdoba que rezaba por Fragua VII!

Saludos,

Anna

3 comentarios:

Vero dijo...

Gracias Anna!
La experiencia de escribir a los chicos fue muy enriquecedora para los que lo hicimos!
Una alegría que Fragua VII haya sido todo un éxito!
Saludos!

Cristian dijo...

Muy buenas crónicas Anna, gracias!!
Nos diste un pantallaso de la universalidad que tiene esta Buena Noticia y, a la vez, el modo en el que la comunicamos en Fragua.
Gloria a Dios!

Anónimo dijo...

sos vos señor no nosotrossssssssssss gloria ti¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ siempre y en todo lugar.